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Papá vuelve al trabajo hoy, 2 meses más tarde de haber tenido a nuestro segundo hijo. No puedo decir que el tiempo haya pasado rápido («intenso» sería una mejor definición); pero sí que, como suele pasar con todo, nos ha pillado por sorpresa esto de que ya tenga que volver a la rutina de antes. Ahora que empezábamos a tener una rutina nueva para tenerlo todo controlado… Vueeeeelve a empezar 😛
Yo estaré de «baja» hasta pasada Semana Santa, a principios de abril. Un total de 5 meses. Y él ha estado 2 meses de baja ayudando en casa.
El secreto está en que yo soy autónoma (alguna ventaja teníamos que tener los autónomos, no?). El padre puede «robar» semanas de la baja de maternidad. Si no voy equivocada, la madre tiene que hacer 6 semanas obligatorias tras el parto (que cuadra con la cuarentena), pero pasado este tiempo, la madre puede ceder todo el resto de baja o el tiempo que quiera al padre. Y ahí viene el truco: si la madre es autónoma, cede semanas de baja al padre (que trabaja en una empresa por cuenta ajena, en nuestro caso) y ella simplemente está de baja/excedencia/off pero sin cobrar tanto tiempo como desee (o aguante….).
De esta forma se consigue que la madre igualmente vuelva al trabajo cuando ella quiera/decida y que el padre esté de baja cobrando y ayudando en casa, a la familia — que los inicios siempre son un poco caóticos, ¡con uno y con dos!
Si alguna de vosotras es autónoma también y el padre trabaja por cuenta ajena, no dudéis en hacer este truco para que así tengáis más tiempo compartido de «baja».
Para solicitar la baja tendréis que tramitarlo en la Seguridad Social, como siempre. Pero es importante que el padre tenga el OK de su empresa para alargar la baja de paternidad algunas semanas más. La empresa tiene que darle el consentimiento.
- Primero la madre solicita su baja por maternidad.
- Luego el padre solicita su mes de baja de paternidad (según legislación actual en España en 2017, tocan 28 días naturales).
- Y tras la aceptación de la baja de paternidad el padre solicita las semanas extras de «maternidad» (sí, sí, «maternidad»; son semanas de la madre que pasan al padre pero se le siguen llamando maternidad para que no se confundan). Y obviamente éstas se le restan a la madre, quien terminará oficialmente su baja un poco antes de las 16 semanas establecidas por ley. Pero siendo autónoma, cuando se le acabe la baja, dejará de cobrar la prestación pero seguirá sin trabajar hasta que ella lo decida.
- Si el padre tiene vacaciones por gastar, para acumular a la baja de paternidad, primero se gastan las semanas de vacaciones y luego se gasta la paternidad (y maternidad). Y en ese caso, el padre deberá esperar a que hayan pasado todos los días de vacaciones para pedir la baja de paternidad (aunque el niño ya haya nacido).
Las gestiones pueden hacerse online y también de forma presencial —aunque como todo esto siempre es un poco lío, mejor pasarse por una oficina de la Seguridad Social para que os ayude un gestor.
En fin, mientras en este país las bajas de maternidad y paternidad no sean algo más europeas y normales tendremos que seguir haciendo truquillos varios para que los inicios de una familia sean lo más cómodos y fáciles posible.