La lactancia materna es un tema estrella durante el embarazo y, a veces, nos confundimos con toda la información y no sabemos si hay que comprar algo “por si acaso”. Hoy voy a aprovechar para hablarte de los gadgets asociados a lactancia materna y cuándo son útiles (y cuándo no).
Quizás te has preguntado: ¿tengo que comprar un sacaleches para estar preparada por si lo necesito? ¿Qué es una pezonera y para qué se utiliza? ¿Qué es el protector de pezón? Si te has hecho estas preguntas y buscas respuestas, sigue leyendo. Te ayudo a entender para qué sirve cada cosa y en que caso puede servirte.
Pezoneras
Las pezoneras son unos “pezones plásticos” que se ponen sobre el propio pezón con varios objetivos. Uno de los objetivos puede ser facilitar el agarre al bebé cuando el binomio pezón-boca del bebé no está funcionando en este momento (no quiere decir que mañana no funcione 🙂 ). Otro de los posibles objetivos es proteger al pezón cuando ya se han instaurado grietas y la lactancia es muy dolorosa. Y, por último, también he conocido algún caso de mamás con pezones altamente sensibles que sentían demasiado dolor con un buen agarre del bebé.
Es muy importante recordar que antes de empezar a utilizar una pezonera hay que buscar la causa del problema. Si el binomio pezón-boca del bebé no está funcionando es vital saber la causa (podría ser: colocación de la boca, colocación del bebé, falta de práctica, frenillo lingual…) porque puede que con un poco de educación sanitaria y práctica lo tengáis solucionado.
Piensa que tener el pezón plano no tiene porque significar que el bebé no pueda realizar un agarre fantástico. La mayoría de mujeres perciben cambios en sus areolas y pezones al final del embarazo, no te preocupes antes de hora.
Conclusión: compra pezoneras solo si son realmente necesarias. Pero si las necesitas, hay varias marcas y modelos entre los que elegir 🙂 Por ejemplos: éstas de Philips Avent, éstas de Suavinex o éstas de Medela. Buenas marcas las tres.
Las pezoneras no necesitan esterilización después de cada uso pero sí un buen lavado y secado al aire. Algunos modelos tienen una muesca en la “areola plástica” donde va la nariz. Recuerda que depende de la posición del bebé la nariz también cambian así que cuidado al colocarlo.
Protector de pezón
El protector de pezón es muy poco conocido pero, para mí, un básico. Son unas copas que se ponen bajo el sostén, con orificios de ventilación para transpirar. Son especialmente útiles cuando los pezones están agrietados o doloridos para favorecer su curación sin que nada esté en contacto.
Lo puedes llevar todo el día bajo el sostén, con un reborde de silicona son cómodos, pero cuidado: puede que se vaya acumulando leche entre tomas o, sobretodo, cuando le das de un pecho que va saliendo del otro. Esa leche acumulada puede salir por los orificios superiores si te agachas hacia delante. Evidentemente…os lo digo por experiencia propia 🙂
Como ya os contamos, las dos mamás de Loca Academia Familiar hemos utilizado el protector de pezón como truco para almacenar leche sobrante de nuestro segundo hijo/a y dársela al hijo mayor (un extra de defensas!!). Lee aquí éste y otros trucos infalibles que todos los padres deberían conocer.
Discos absorbentes
Extractor o sacaleches
Este es el gadget por el que más me han preguntado: ¿hace falta comprar un sacaleches durante el embarazo? Yo siempre recomiendo esperar a ver como va todo.
No es tan útil para disminuir la ingurgitación mamaria asociada a la subida de la leche. En ese caso tan puntual puede ser mejor una extracción manual ya que será algo puntual (de pocos días) y el coste del extractor puede que no valga la pena.
Hay dos tipos básicos de sacaleches: manual y eléctrico. Algún modelo es mixto, y éste puede ser útil si no tienes asegurada la corriente eléctrica en el momento de la extracción.
Bolsas de almacenamiento de leche materna
Si vas a utilizar el sacaleches a menudo (por ejemplo, si trabajas fuera de casa y quieres sacarte leche para que el cuidador de tu bebé pueda dársela mientras no estés y, a la vez, puedas ir siguiendo el ritmo habitual de las tomas cuando estáis separados), necesitarás almacenar la leche. En la web de referencia de Alba Lactancia te cuentan cuantos días puedes guardar la leche extraída (en la nevera o en el congelador).
Para guardar la leche que te saques, puedes usar bolsas de plástico de congelar (las habituales) o éstas específicas de las marcas de sacaleches (por ejemplo, aquí va un pack de 50 bolsitas de Medela). La diferencia es que estas bolsas son más pequeñas que las de congelar, tienen una forma que permite que una vez cargadas con leche se aguanten de pie (lo que facilita el almacenaje) y tienen un medidor incorporado para que sepas cuántos mililitros de leche hay. (pero repito, las del congelar de toda la vida también valen). Una bolsa = una toma. También puedes guardar las tomas en potecitos de plástico reutilizables, como los de Avent Philipps.
Bolsa de esterilización
Las bolsas de esterilización son otro gadget poco conocido pero ¡útil como pocos! Sirve para esterilizar en el microondas las diferentes partes del sacaleches, y también chupetes, de forma rápida, y sin tener un armatoste en la cocina. Recuerda siempre secado al aire. Nada de utilizar los trapos de cocina, son una fuente de gérmenes importante.
Releyendo el post me he dado cuenta que parece que se necesiten muchas cosas para dar el pecho cuando, en realidad, sólo se necesita práctica (es decir, tiempo) y ayuda. Muchas veces con el magnifico apoyo de tu pareja es suficiente y, si necesitas más información, hay muchos recursos a tu disposición: recuerda que hay muchos centros de apoyo a la lactancia materna cerca de ti donde puedes ir a consultar tus dudas sobre lactancia materna y conocer a otras mamás lactantes. ¡No dudes en acudir a ellos! La información será la clave y algunos de estos productos pueden ayudarte a llevar mejor las primeras semanas de lactancia. ¡Ánimo!
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