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Nuestra hija, como tantos otros niños y niñas, disfruta muchísimo jugando en la arena: mover arena de un vaso a otro, hacer un agujero, practicar con la pala como si fuera una enorme cuchara, destruir los castillos que los adultos construimos… Nos planteamos comprar un cajón de arena para casa pero al no encontrar ninguno que satisficiera nuestras expectativas presupuestarias y de uso, decidimos construirlo nosotros mismos.
Ha sido fácil y rápido y de momento el cajón de arena es todo un éxito. Aquí va un pequeño manual de lo que hemos usado para que otros podáis construir vuestro propio cajón de arena para casa.
Especificaciones: diseñando nuestro cajón ideal
Tras haber visto varios en distintas webs educativas, decidimos que nuestro cajón tenía que ser aprox. de 1m x 1m x 1 palmo de hondo y tener una cubierta para la lluvia y para evitar que los gatos entraran cuando no estamos delante. Las cubiertas que vimos eran de madera y eran tal armatoste que nos quitaba espacio del cajón o del patio. Por eso, decidimos que nuestra cubierta sería una lona impermeable y que iría atada a los lados.
Lo que nos ha costado: 71€ (30€ de arena y 41€ de materiales). Teniendo en cuenta que el que nos gustaba más costaba 200€, ¡hemos ahorrado bien! Además, si añadimos la satisfacción de papá por haberlo construido él mismo al más puro estilo «bricomanía» o «ja t’ho faràs», el éxito es incalculable).
Materiales utilizados:
- 4 maderas tratadas para exterior de 1,20m cada una (o 2 maderas de 2,40 cortadas por la mitad)
- Tornillos y escuadras para unir las maderas entre ellas
- Red geotéxtil para bichos de jardín (suelo del cajón)
- Lona 1,3 x 1,3m (tapa)
- 6 sacos de arena de río lavada (unos 5€ cada 25kg). Se compra en una jardinería = 30€
- Barrena, destornillador, tijeras.
Instrucciones:
Juntar las cuatro maderas con las escuadras y tornillos para formar un cuadrado. Antes de atornillar las maderas, asegúrate de colocar el «suelo»: una red geotéxtil de color negro que evitará que entren bichos y hierbas. Coloca la red entre las juntas de las maderas para que quede bien unida y sin agujeros entre las maderas. Lo más práctico es que acabes poniendo la escuadra y el tornillo sobre la red geotéxtil y está sobre las maderas. Así cubrirás todo el espacio de la madera.
Una vez unido todo, debería quedar un cuadrado estable, como te muestro en la foto. Falta la arena pero el cajón ya es funcional y nuestra peque quiso estrenarlo poniendo sus juguetes dentro 🙂
La arena es importante que sea de río y lavada. ¿Por qué? Para que no suelte polvo cuando la niña/o juegue y mueva arena. Como será arena lavada, lo más recomendable es que la dejes secar al sol unos días. Se puede jugar ya, claro que sí, pero verás que la sensación es de arena mojada, como en la orilla del mar. Es mejor para hacer castillos eso sí; pero verás que la ropa de los niños queda húmeda.
Este tipo de arena se compra en una jardinería. Para rellenar nuestro cajón necesitamos 6 sacos. El precio de los sacos de arena es de unos 5€ cada 25kg (gastamos unos 30€).
Ya solo falta colocar la tapa. Como os contaba, optamos por una lona que se fija a los dos lados de la madera (con un pequeño enganche colocado en la madera). Como nuestro barrio está lleno de gatos callejeros, para nosotros es importante tapar el cajón cada día cuando no estamos jugando. Y así además, cuando llueve (a menudo en La Garrotxa, donde vivimos) la arena sigue seca.
Y ya está listo. ¿Qué te ha parecido?
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