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¿Vosotros tampoco sabéis que hacer con los dibujos tan chulos que os regalan? ¿Ya no tenéis marcos para las fotos? Cuando nuestra nevera empezaba a estar demasiado repleta de dibujos, empezamos a pensar opciones para colocar los dibujos y algunas fotos impresas. Nada nos acababa de convencer hasta que en un intercambio de casas descubrimos un buen invento. No sabemos si lo inventaron ellos o se lo copiaron a alguien también pero a nosotros nos convenció por completo.
De esto hace un año. De vuelta, elaboramos unos lienzos para nuestra habitación y ahora le ha tocado el turno a la habitación de las niñas. ¡¡¡Así de bien han quedado!!!
Os lo enseño paso a paso:
1. Necesitamos un lienzo en blanco, pintura en spray, cinta y grapadora. Los lienzos de las fotos son de 30×30 y cada cinta nos sirvió para un lienzo, de pintura nos sobró.
2. En el exterior, y sobre una superficie que se manchará (hule, plástico, periódicos…), pintamos con el spray escogido por las niñas los lienzos. Al secarse le dimos otra capa.
3. La cinta se va colocando como más guste, los bordes se grapan en la cara oculta del lienzo para aprovechar más el rodillo.
4. Nosotros los hemos colgado con un pequeño clavo aunque también se puede colgar con cinta adhesiva doble para pared.
5. Finalmente, solo hace falta colgar con pequeñas pinzas las fotos o los dibujos. ¡Y ya está!
Lo que más me gusta de estos lienzos es que, con el paso del tiempo, podremos ir cambiando las fotos, los dibujos…. o puede que acabe haciendo más lienzos 🙂