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Ya estamos a las puertas del verano, con San Juan a la vuelta de la esquina y las temperaturas subiendo. Y nosotros, ¡contentísimos de haber estrenado playa y piscina!
Otra de las estrenas de la temporada ha sido pasar un fin de semana en el camping Tamarit Beach Resort. El año pasado fuimos a pasar el día con unos amigos que tenían alquilado un bungalow de temporada…. Y nos costó tanto trabajo que nuestra mayor quisiera irse, que este año hemos decidido pasar el fin de semana completo.
Nuestra experiencia en el Camping Tamarit
Nos alojamos en un bungalow Cottage Thalassa y sólo puedo deciros que los campings ya no son lo que eran en mi infancia… ¡¡Ahora son una pasada!! 🙂 (No puedo hablaros de las parcelas ya que nosotros hemos ido de bungalow).
El Cottage Thalassa es muy cómodo, con cama de matrimonio y tres individuales (unas literas que hicieron la delicia de nuestras niñas). Contaba con baño, cocina y nevera grande, también tenía sofá y una mesa en la terraza, donde hicimos las comidas y cenas.
Quiero añadir que, al llegar, la puerta de la ducha estaba salida del riel y avisamos a recepción; en un rato vinieron unos chicos de mantenimiento y solucionaron el problema. ¡Gracias por la rapidez!
A mí, el camping me pareció enorme, pero nuestros amigos (que son mucho más conocedores del tema) que nosotros nos dijeron que en realidad no es un camping de grandes dimensiones, sino que se conocen muchos inquilinos entre ellos y que, por ejemplo, los monitores suelen conocer a todos los niños por su nombre.
Por qué gusta tanto este camping
Precisamente los monitores son una de las claves de este camping resort. Tienen organizado un horario de actividades infantiles que quita el hipo: desde las 10 de la mañana ya pueden empezar a hacer manualidades y juegos; también por la tarde se organizan actividades; y a las 18 horas: ¡Mini-Disco! 🙂 El sábado que estuvimos nosotros, la Mini-Disco incluía una Fiesta Holi con lo que acabamos bien coloridos y divertidos.
Por razones familiares nos tocó estar en el área de actividades infantiles que, por cierto, es un espacio cubierto que protege de las inclemencias del tiempo, tanto en forma de lluvia como del sol del agosto, pero pudimos ver como los adultos tampoco tienen tiempo de aburrirse si no quieren.
Para los que seáis más deportistas podéis disfrutar de aquagym, yoga, pádel o tenis. Además se hacen actividades dirigidas propias de gimnasio como zumba o spinning. Tienen también una sala acristalada de fitness. Nosotros lo dejaremos para cuando las niñas sean más mayores; de momento los juegos en la piscina y el parque son mi ejercicio físico principal 🙂
Y hablando de ejercicio físico, ¡en la piscina sí que lo hicimos! La disfrutamos todo el sábado. ¡Es una piscina estupenda! Cuenta con zona de infantil (que no cubre), una entrada tipo playa (donde nuestra pequeña se reía por el simple hecho de correr agua adentro), unos chorros de presión para los hombros (donde nuestra mayor descubrió que podía atravesar una cortina de agua y tirarse de cabeza a la vez)… Todo esto ya sería suficiente pero es que hay que añadirle dos toboganes de agua y una zona de juegos infantiles a base de chorros y embalses que hacen las delicias de todo el mundo, mayores y pequeños.
También la playa es un punto a favor de este camping ya que tiene salida directa y, eso, ¡es un lujo! Es la playa de Tamarit, de arena fina y de las que puedes andar un poco hacia dentro sin hundirte. Además de todos los juegos de los que se pueden disfrutar en una playa, en este caso hay un centro donde alquilar bicis, kayaks, patinetes y demás.
Otra comodidad del camping para las familias con niños pequeños y bebés son los lavabos adaptados a los niños. Aunque son prescindibles, son un gran detalle y algo que se agradece. Cuentan con inodoros pequeños, duchas y lavamanos adaptadas a su altura y bañeras de mármol para los bebés. ¡Gracias por pensar en la comodidad y la autosuficiencia de nuestros peques!
Qué hacer cerca del camping Tamarit
Si tenéis pensada una escapada para varios días a la Costa Daurada con niños y queréis hacer un poco de turismo tampoco os faltarán ideas.
- Ir a la playa, que está justo al lado del camping, con salida directa. Saldréis del bungalow con la toalla y el bañador puesto!
- El Castillo de Tamarit es una fortaleza que está en la misma playa de Tamarit por lo que es muy fácil de llegar.
- También muy cerca (caminando desde el camping) se puede pasear o un ir en bici por los caminos que rodean el río Gaià.
- Por supuesto, el camino de Ronda es un clásico de la Costa Daurada y puede ser recorrido todo el trecho que queráis a través de acantilados y playas.
- Si no os importa coger el coche, podéis visitar numerosas poblaciones como Tarragona o Altafulla o pasar un estupendo día en Port Aventura, que queda bien cerca.
- Visitar Salou (sus divertidas fuentes, camino de ronda, helados buenísimos…) y / o Cambrils
Un camping muy recomendable para familias con niños
En definitiva, lo pasamos estupendamente y recomendamos este camping como alojamiento para familias con niños en la Costa Daurada.
Por suerte, en el camping Tamarit Beach Resort se sigue manteniendo ese aire que tanto disfrutábamos de pequeños: esa experiencia de libertad de los pequeños, de poder coger la bici e ir a comprar un helado, de ir a buscar a las amigas de los bungalows cercanos, de la alegría de descubrir que está todo el grupo junto este fin de semana, de irse a dormir a las tantas aunque se sigan levantando bien pronto… Todo lo que yo recuerdo del camping de cuando era pequeña. Echad un vistazo a la página web del camping Tamarit para más información o clickad en este link para ver disponibilidad y precios en Booking.com.