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Durante nuestro viaje a Santander con niños hicimos una escapada en familia al Parque de la Naturaleza de Cabárceno, y fue un éxito. El combo era fácil: animales en semilibertad + niños pequeños + pequeña aventura = día ideal. También se le añadió el sol así que fue insuperable, y eso que eligiendo Cantabria como destino de vacaciones para el mes de diciembre nos la habíamos jugado un pelín… Pero salió bien y lo pasamos genial!
¿Que es el parque de la naturaleza de Cabárceno?
El parque de la naturaleza de Cabárceno no es un zoo, ni es un parque natural. Son 750 hectáreas de terreno que un día fueron una mina a cielo abierto. En este momento, es un precioso paisaje totalmente adaptado a la vida de los animales y a las visitas de público humano. Desde un enorme y apacible lago hasta unas montañas rocosas, todos los parajes son surcados por carreteras (20 km en total) van dando paso a enclaves donde los animales tienen su hogar.
Las condiciones de vida de los animales son buenas, estando en régimen de semilibertad, esta considerado uno de los mejores parques europeos en este aspecto.
La dinámica dentro de Cabárceno es, esencialmente, circular con el coche hasta los diferentes aparcamientos esparcidos por todo el parque. Una vez el coche aparcado, puedes pasearte entre los diferentes “recintos” de los animales de esa zona. Los hogares de los animales suelen ser espacios grandes por lo que ir con tranquilidad y pasearse buscando todos los ángulos suele significar ver bien a todos los animales. Mucha calma 🙂
Entre los diferentes aparcamientos hay varios minutos en coche por lo que es necesario ir con vehículo privado. Aun así también es muy recomendable el uso de los telecabinas para ver toda la envergadura del parque, así como poder vislumbrar desde el aire algún animal que se nos haya resistido desde el suelo.
Los telecabinas entran con el precio de la entrada habitual y se puede hacer el circuito triangular para acabar en el punto de inicio donde estará el coche aparcado. Para que veas por ti misma la envergadura del parque puedes descargarte su mapa. Tengo que deciros que nosotros aprovechamos a última hora, cuando el sol se estaba poniendo, para subir al telecabina y podéis ver el resultado. Unas vistas espectaculares desde las alturas.
¿Que animales hay en el Parque Natural de Cabárceno?
Pues son 120 especies de animales distintas. Algunas de ellas viven juntas en el mismo recinto, de la misma manera que se encontrarían en el mundo natural. Para nuestras niñas el animal que más triunfó y el que más recuerdan son los tigres.
Creo que es la primera vez que veían tigres en semilibertad y les encantó cómo jugaban entre ellos, estuvimos un largo rato viendo y observando su comportamiento y nos inventamos su historia. Había dos tigres jugando entre ellos y llegó una tercera, quien decidimos que sería la madre que ponía un poco de paz. No sé si era verdad pero a ellas les encantaron las similitudes con su vida 🙂
Por mi parte las jirafas siempre me han gustado y en el Parque Natural de Cabárceno he tenido la oportunidad de volver a verlas con ese paso tan elegante paseándose entre los búfalos y las avestruces. Nos quedó algún animal pendiente de ver porque estaba “escondido” dentro de algún recoveco de su recinto que quedaba fuera de nuestra vista. Algún otro animal, a causa de su ritmo vital, durante el día estaban básicamente durmiendo así que no lo vimos interactuar.
¿Que más se puede hacer en Cabárceno?
Además de ver todos los animales nosotros fuimos a dos “exhibiciones”: los leones marinos y las aves rapaces. En el primer caso, los leones marinos realizaron una serie de ejercicios mientras nos iban explicando curiosidades sobre estos animales. Los ejercicios que hacen se les enseñan con el fin de realizar cuidados de rutina (por ejemplo, se les enseña a levantar una aleta para las exploraciones veterinarias de rutina). ¿Sabes como diferenciar a simple vista de las focas y los leones marinos? Los segundos tienen orejas (pabellón auditivo) mientras que las focas sólo tienen oídos. 🙂
La exhibición de las aves rapaces fue espectacular. Además de aprender muchos sobre estos desconocidos animales les vimos volar sobre nosotros en busca de pequeños trozos de alimento. Aunque la novedad fue poder observar su vuelo desde la distancia porque algunos de las aves fueron transportadas a lo alto de una de las montañas (dentro del parque) y, desde allí, descendían en picado hacía nosotros.
Creo que los cuidadores y educadores del lugar hacen una labor valiosísima de cara a divulgar este trabajo.
El descubrimiento del Parque de la Naturaleza de Cabárceno ha sido fantástico. Las escapadas son un respiro de aire fresco en mitad de la rutina y poder ver animales en semilibertad es siempre una apuesta segura. Además está al lado de la preciosa ciudad de Santander, en este otro post os contamos qué podéis hacer en Santander con niños.
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